Esta es la gran perdición cuando se juega a un juego online, el lag (que tiene mucho que ver con el ping de la conexión), el retraso entre el momento en que movemos el mando o pulsamos un botón y el personaje responde en pantalla. Los buenos jugadores saben que esto puede significar la muerte en un duelo de francotiradores en CoD o perder la Liga de Campeones en el último segundo cuando se juega al FIFA, así que ¿cómo podemos intentar solucionar esto? Aquí tienes algunos consejos.
Sin una buena conexión, todos los “trucos” son inútiles.
Obviamente, no podemos esperar tener un lag decente si no tenemos una buena conexión. En este sentido, Movistar destaca como la que tiene uno de los mejores servicios de fibra óptica para jugar, no sólo por las velocidades de 50 o 300 Mb simétricos, sino porque su red tiene el ping más bajo. Para los que estén perdidos en esta terminología, el ping es la latencia de la conexión, o lo que es lo mismo, lo que tardan en comunicarse dos puntos remotos. Básicamente, con un ping más bajo, se consigue una interacción instantánea con otros jugadores, o lo que es lo mismo, desaparece el temido lag.
El operador ofrece actualmente un descuento del 60% durante 12 meses para la fibra de 50 Mb, lo que deja el coste mensual en 14,90 euros más la cuota de línea. Al mismo tiempo, también es posible ahorrar un 37% de la factura anual en la modalidad de 300 Mb, quedando la cuota mensual en 26,90 euros, más la cuota de línea. En ambos casos, si queremos tener una velocidad de subida y bajada simétrica, debemos añadir 5 euros a la cuota mensual.
Consejos para reducir el lag en los juegos online
Ahora bien, si por la razón que sea, nos encontramos con algún problema de retraso adicional que va más allá de la conexión, hay algunos trucos que podemos aprovechar para solucionarlo.
La primera es seleccionar los servidores de juego que están cerca de nuestra ubicación. En la mayoría de juegos podemos escoger los servidores disponibles que están más cerca de dónde nos conectamos. Es una forma eficaz de reducir la latencia y el truco está en buscar filtros de localización de servidores o alguna indicación en el nombre de los mismos (EU, NA-West, etc.). No todos los juegos tienen esta opción, por lo que el consejo general es intentar jugar siempre con otros jugadores de tu zona.
Es casi una “perogrullada”, pero aunque la fibra óptica (y 300 MB simétricos son casi inagotables) es tremendamente capaz de soportar múltiples conexiones, hay aplicaciones que consumen un ancho de banda importante. Lo mejor es que, si es posible, desactivemos todas las aplicaciones que puedan tomar “megas” en la conexión. En este sentido, no está de más pasar el antivirus si se juega desde el PC para evitar tener algún malware que esté haciendo de las suyas y consumiendo datos sin que te des cuenta.
Aunque el WiFi es lo más cómodo y ya hemos conseguido velocidades más que respetables, el espectro inalámbrico puede estar saturado y si varias personas utilizan el mismo punto de acceso, se puede crear un cuello de botella que no nos permita exprimir la fibra óptica hasta el límite en los juegos online. Para ello, no hay mejor opción que utilizar el cable Ethernet y conectar el PC o la consola directamente al router para tener un auténtico “cañón” de velocidad para nosotros solos.
Si seguimos viendo que existen un lag elevado, un consejo rutinario es el de reiniciar el router. En unos 30 segundos estará de nuevo en funcionamiento y si algún proceso le estaba causando algún retraso, desaparecerá.
También en el router tienes la opción de permitir controles de QoS (Calidad de Servicio), para priorizar el tráfico de juegos en tu red y disfrutar de tus juegos online sabiendo que tienes prioridad aunque otros programas o personas estén usando la misma red. Y si tu PC no está preparado para soportar este tipo de videojuegos, no olvides que puedes disfrutar de muchos juegos de navegador online que requieren muy pocos recursos y, por tanto, puedes disfrutarlos desde tu navegador favorito sin necesidad de instalaciones.